miércoles, 4 de septiembre de 2013

El desierto

Las grandes cosas empiezan en el desierto, en el silencio, en la pobreza.  Nosotros mismos no podríamos participar en la misión del Evangelio sin entrar en esa experiencia de desierto, de su indigencia, de su hambre.
Joseph Ratzinger

Guardaos de la ansiedad y de las inquietudes, porque no hay cosa que impida tanto el caminar hacia la perfección.

San Pio de Pietrelcina

3 comentarios:

  1. El desierto,no es la belleza,que distrae al alma.
    Es una union entre la soledad y al"que no vemos".

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  2. El poder entrar dentro de uno mismo es lo más grande que hay porque nos capacita para relacionarnos con Dios más cerca...más intimamente, más personalmente y el que lo ve así..es afortunado.

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